Como todos sabemos, es común en cualquier organización que quiera tener presencia en Internet dedicar recursos humanos y económicos al diseño de la campaña de marketing. Sin embargo, apenas se dedican recursos a tener una legalidad desde el diseño, algo característico del modelo anglosajón de cumplimiento y muy lejano del modelo continental. Las más de las veces, copiamos, aunque copiemos algo que no tenga nada que ver con nuestro negocio. Copiamos las fotos, los textos, las condiciones generales… Es lo que nos han enseñado, que internet es gratis, que no se pueden poner puertas al campo.